EL SACRISTÁN QUE SALVÓ AL SANTÍSIMO

JULIO DOMINGUEZ ARJONA
18 de Noviembre de 2014

Un servidor, siempre ha escrito, y cada vez que me han preguntado por el zapaterístico tema de la recuperación de la memoría histórica, siempre he contestado lo mismo , vamos a recuperarla, pero TODA, no haciendo un borrando sesgado y sectario de la misma .-

Hoy nuestros pasos nos llevan hasta la calle Feria a la Iglesia de Omnium Sanctorum . En una de sus capillas hay una humilde lápida funeraria en el suelo donde se puede leer 18 de Julio de 1936, (no como en otra conocida tumba, donde acomplejadamente llegó la selectiva goma de borrar de nuestra Historia , y olvidándose de su propia historia ). En la misma se puede leer :

DEPA
AQUI REPOSAN LOS RESTOS DE
NUESTRO HERMANO EL M. I. SR
D ANTONIO TINEO LARA
PARROCO EJEMPLAR
ARCEDIANO DE LA SIMP
CATEDRAL DE SEVILLA
PRELADO DOMÉCTICO
DE SS Y DIRECTOR ESPIRITUAL
DE ESTA HERMANDAD
QUE FALLECIO
EL 22 DE MARZO DE 1980
D FRANCISCO PLAZA
RODRIGUEZ
SACRISTAN
DE ESTA PARROQUIA
QUIEN SALVO AL
SANTISIMO SACRAMENTO
DEL INCENDIO.
18 DE JULIO DE 1936

En ella se menciona al sr cura párroco D. Antonio Tineo Lara que fuera impulsor del seminario menor de Pilas - Sevilla- , y el protagonista de nuestra historia el sacristán D. Francisco Plaza Rodriguez , que en aquel mas que incierto y caluroso sábado del 18 de Julio de 1936, en pleno "Moscú sevillano", en medio de una ensalda de tiros , cuando de una forma democrática , los anarquitas, sindicalistas, demás militantes de izquierdas, y rojos en general pensarón que la mejor manera de parar el denonante de la contienda civil y fraticida , era pegarle fuego a todo lo que oliera a incienso y sacristía , como asi ocurrió en tantos templos sevillanos entre ellos Omnium Sanctorum ( y no por un corto circuito ) .-

El sr Plaza Rodriguez , en medio de aquel peligro mas que real, confusión y aquelarre de fuego y violencia, se acordó de Jesús Sacramentado, le pudo mas la lealtad así mismo y a sus creencias, y para el que Santísmo no fuera presa de las llamas , procedió a recogerlo, llevándoselo a un lugar seguro , poniendo en juego su integridad , en una acto sin duda heróico en unos tiempos en que no se andaban con tonterias, y el gatillo lo tenian tan fácíl como en las películas del Oeste .-

En la misma capilla, en uno de sus laterales, hay una foto de este hombre de aparencia mas que inofensiva y humilde, muy lejos de una imagen aguerrida, que en aquella tenebrosa noche de antorchas , gritos y disparos, sacaría fuerzas de flaqueza , para arriesgar su vida por aquello en lo que creía .-