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La Puerta de Cordoba |
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JULIO DOMINGUEZ ARJONA . 1 de Septiembre de
2000.-
"Erase una vez un príncipe visigodo llamado Hermenegildo, que su padre el poderoso rey Leovigildo envío a gobernar la Bética ( el Betis es otra cosa). Corrían los años finales del siglo IV. Casose con una hermosa princesa de nombre Ingunda ( suponemos que en aquella época serian las Vanesas del Rocio o las Debora de los Dolores de hoy en día). Esta princesa era devotamente católica y entre ella y el entonces arzobispo de Sevilla ,Leandro ( a la postre San Leandro y que no pasó a la historia precisamente por inventar las populares yema del mismo nombre), convencieron la joven príncipe para que abandonara su religión paterna ,el arrianismo ,y abrazara la fe católica. Lo convencieron con tanto éxito, que el protagonista de nuestra historia se bautizó con el nombre de Juan, se autoproclamó rey en Sevilla y se levanto en armas contra su padre.- Su padre Leovigildo ,que profesaba la corriente herejética del arrianismo puso cerco a la rebelde y católica ciudad de Sevilla, hasta que tras su rendición hicieron cautivo al príncipe converso, en la torre de Córdoba y allí fue torturado y decapitado por su osadía, aunque como defensor de la fé católica paso a la nómina de Santos mártires".- Esta leyenda que les acabo de contar , como todas la leyendas , son bellas y necesarias , digamos que es cierto el primer párrafo. En el segundo párrafo es donde comienza la ficción. Efectivamente Hermenegildo, se rebela contra su padre, por devoción o ambición , vaya ustedes a saber, y el padre agota todas las vías pacificas para no legar a las manos con su propio hijo, pero como por lo visto el niño se las traía, ( esto del choque generacional también se daba en la época de los godos ) puso cerco a Sevilla, y al capitular la misma el príncipe rebelde huyo siendo apresado y gozando de la benevolencia de su padre le perdonó la vida, pero digamos le retiró todos sus atributos principesco y lo destierra a Valencia. Pero como el niño tenía que tener tomate, empezó de nuevo a conspirar contra su padre siendo detenido y decapitado en Tarragona en 585.- Y como la
historia
es así y con la hegemonía del catolicismo en la península
Ibérica, de mal hijo , paso a defensor del catolicismo , y de mártir
a santo, solo quedaba un paso aunque esto ocurriera a finales del siglo
XVI, convirtiendose en patron de Sevilla, junto a la Santas Patronas, Santa
Justa y Rufina, San Isidoro, su hermano San Leandro, que convenció
a Hermenegildo para su conversión, San Fernando y La Virgen de los
Reyes, no sola patrona de Sevilla sino de su archidiócesis y la
única "con papeles".-
La gran devoción que hubo en Sevilla, por el santo visigodo a finales del siglo XV y principios del XVI, llegó a construir en su honor, la Iglesia de San Hermenegildo, tal como hoy la conocemos situada entre la Puerta de Córdoba, a la que esta pegada y la Ronda de Capuchinos, ya que su originario culto se profesaba en la torre-puerta, antes mencionada ,donde se contaba con poco espacio lo que motivó la construcción de la Iglesia. Lo que resulta llamativo es que San Hemenegildo fue un príncipe visigodo que murió en el 585 y la puerta de Córdoba junto al Postigo del Aceite , son quizás las dos puertas medievales mejor conservadas que han llegado a nuestros días. Porque no debemos de olvidar que estamos ante una torre-puerta almohade como es la que nos ocupa y esta, junto a las murallas , son de la primera mitad del siglo XII como esta acreditado documentalmente por los escrito de Bayan-al-Mogrih . Es decir mas de medio milenio después de la muerte del Santo, se empezaría a construir la puerta-torre donde devotamente se tiene la creencia que lo hicieron cautivo y mataron . De tener visos de realidad la leyenda lógicamente, seria en el anterior recinto amurallado de origen romano del que desgraciadamente no quedan ningún vestigio.- Como verán eso de no tener claro quien fueron antes si los romanos o visigodos o los árabes, no solo no lo tiene claro los estudiantes de la LOGSE, sino en el siglo XVII tampoco.- Afortunadamente esta torre-puerta de Córdoba , así llamada por ser su salida natural hacía dicha ciudad, se salvo de lo penosa demolición llevadas a cabo a finales del siglo XIX, junto a sus hermanas la puerta de la Macarena y el postigo del Aceite , no corriendo la misma suerte las otras 13 restantes . Los motivos del indulto de las murallas macarenas y la puerta del mismo nombre y la de Córdoba, se debió según el cronista Gonzalez de Leon, al buen estado de conservación |