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Sin título   
EL TEMPLETE
 
EL LLANTO DEL COMERCIO
 
El otro día mi padre, del que he heredado el leer varios periódicos a la vez, me preguntaba con sorpresa como la prensa sevillana venia tan abultada y encima le ganaban dinero que si diez mil separatas, que si coleccionables, que si figuritas,  argumentándome que en sus tiempos que no daban ni la hora, ¿ cuanto ganarían entonces?

Mi respuesta fue clara, en tus tiempo había dos periódicos y como con el tratado de Tordesillas, se repartían Sevilla, sin coleccionables, sin separatas, sin ná de ná y encima  ganaban muchísimo dinero ahora con los veinte mil periódico locales que hay siguen ganando ,pero menos y, o se espabilan o se quedan atrás.-

Pues tres cuarto y mitad de la plaza de Triana ocurre con el llamado comercio tradicional de toda la vida sevillano.¿ se acuerda ustedes cuando en Sevilla no había corteingle?. Permítanme que le refresque la memoria y para los que no conocieron esa época, se la voy a dibujar. Si es cierto que el contacto era mas directo, se conocía a la clientela; se le facilitaba a la señoras de edad una silla para que cómodamente hicieran sus compras; la visa no existía y estaban las famosas libretas donde se apuntaba en su cuenta y se liquidaban, mensual o semestral o anualmente según los casos .-

Pero de otro lado había dos caballos de batallas , que las llamadas grandes superficies, han logrado superar y con creces. Los descambio y "los no me quedan" .El comercio tradicional sevillano siempre resistió numantinamente descambiar cualquier cosas, usted salía de un establecimiento con una prenda de vestir o con un disco, que como no le quedara bien o el disco a la persona  que se lo iba a regalar ya lo tuviera dese usted por perdido. Había algunos establecimientos que esta norma la aplicaban mas relajadamente y aunque no te descambiaban, eso era pecado mortal, tampoco te devolvían el dinero a cambio te daban unos vales como de feria con la caducidad de la temporada, y como fuera un comercio especializado, o al final acaba usted comprado lo que no le hacia falta o de lo usted por perdido.-

Después estaban "los no me quedan", la economía en la compra extrema llevada casi al cicaterismo, era el autentico desabastecimiento de este comercio, usted podía encontrar dos o tres modelos de  pulsera no mas   , un libro de moda o se apresuraba a usted a comprarlo o en pocos días se convertía en pieza de colección o la ferreterías donde si usted tenía que comprar un numero importante de material tenia que recorre varias.-

Y en esto llegó ancalecorteingles, llegaron los continentes, y con ellos "aquí sobra de to y no farta de na" y si usted no queda contento le devolvemos hasta las primeras quinientas pesetas que le dieron en la primera comunión; y con ello el comercio tradicional sevillano aprendió de que con eso de "santa rita , rita lo que se da no se quita" , no iban a ninguna parte y que había una cosa que llamaban almacén que había que llenarlos .-

Y ahora viene la libertad horaria, pues ya saben, que aprenda de la prensa sevillana, que cuando ha llegado las vacas flacas de la competencia, han aprendido a cambiar el tercio con coleccionables, medadillas y peliculitas; pues señores comerciantes ya saben el tiempo que ustedes campeaban por sus respetos sin quien les hiciera sombra hace mucho que paso a la historia, ahora sigan ganado dinero, pero menos y renuévense o ...ya saben ; lo que no vale es quejarse, sino coger el paso a los tiempos.-
 

Julio Dominguez Arjona


 
 

 

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