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75 AÑOS DE CÁTEDRA

Azulejo del Cristo de la Buena Muerte en la Plaza de la Encarnación
JULIO DOMINGUEZ ARJONA
Érase una vez un jesuita , que en la primera mitad del siglo XVII y para la Casa Profesa de la Compañía de Jesús en Sevilla, encargo a un escultor cordobés la talla de un Cristo, curiosamente el escultor murió joven siete años después a los 44 años de edad, suponemos que Dios al ver con la genialidad que  lo retrataba en la tierra lo quiso llevar a su corte celestial como escultor de cámara. Curiosamente su maestro de Alcalá la Real le  sobrevivió, ya que murió a los 60 años de edad, suponemos porque le Creador lo dejo en la tierra mas tiempo para que contemplara como su Hijo, Jesús de la  Pasión, solo le faltaba hablar.-

En 1767, Carlos III Rey de Nápoles y de España, Duque de Parma y Piacenza., a todas luces no le tenia que caer muy bien los jesuitas porque no solo ordeno su expulsión de territorio que por aquellos tiempos eran bastante grandes , sino también la expropiación de sus bienes entre los que se encontraba la Casa Profesa y el  Crucificado pasando a la propiedad del Estado Español, el cual le encontró utilidad rápidamente a la residencia jesuita convirtiéndola en Universidad hispalense cuatro años mas tarde y mientras el Cristo colgaba aletargado en una de sus capillas.-

Paso el tiempo y en 1833 , el Crucificado sale de su enclaustramiento, paseando por primera vez  por  la calles de Sevilla y para asombro de los sevillanos gracias a los hermanos de la cofradía de la Lanzada, lo colocan en su paso , solo por aquel año, para regresar a su capilla de la Universidad de la calle Laraña.-

Tendría que pasar otros noventa y tres años, para aquel Cristo encerrado en aquella capilla volviera a salir a la calle pero ya de una forma continuada por mor de un grupo de universitarios  y profesores crearan una hermandad, dos años antes en 1924 y el pueblo sevillano no se quebró mucho la cabeza llamándolas " la de los Estudiantes", dándole a la cofradía desde el primer día un sello de severo recogimiento y sabor a antigua .-

Y tanto estudiar, tanto estudiar que un estudioso señor, pocos años después de su fundación le da por descubrir que el Cristo lo había tallado el escultor cordobés y no su maestro que se llamaba Martínez Montañés, y le pasaba como a Astorga con las Vírgenes le atribuían todos los Cristo. Este descubrimiento, en aquella época,  lejos de ser motivo de jubilo , sentó como un tiro. En 1983, en un traslado accidentalmente el Cristo se rompió , y apareció un documento dentro de él, la "firma" de su escultor, dando la razón al señor estudioso, curiosamente en esta ocasión el descubrimiento fue para regocijo de todos .Cosas de la vida -

La Universidad de la calle Laraña se quedó chica , y pasó a la  Real Fabrica de Tabacos , y con gran sentido de la lógica la hermandad se trasladó , donde estaban  sus hermanos estudiantes. corrían los años cincuenta y en la actualidad es la única cofradía que sale de un edifico civil, concretamente del paraninfo universitario hispalense.-

En los finales de los 60 principio de los 70, el tema de los costaleros empezó a enrareserse, incluso algunos agoreros llegaron a vaticinar la desaparición de los mismos , he incluso se llego a inventar un artilugio mecánico para levar los pasos simulando el movimiento de aquellos. gracias a Dios a alguien se le encendió la bombilla y en 1973 una cuadrilla de estudiantes portaran  a su Cristo , por primera vez en los que a la Semana Santa se refiere pues un año antes las Virgen de las Aguas del Salvador lo había hecho por costaleros no profesionales.-

Este año el Cristo ha sido cedido por la Universidad de Sevilla a su hermandad, setenticinco años después de su fundación que en este mes se celebra y 379 años después de que un escultor de cuarenta años cordobés , llamado Juan de Mesa tallara las mas imponente, impresionante , inconmensurable, inimitable  expresión de la Muerte del Hijo de Dios que por ser tan hermosa, le llamaron la Buena Muerte.-
 



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