Celebra hoy la Iglesia la festividad del
Dulce Nombre de Jesús que inicialmente correspondía al primer
día del año en que se conmemoraba la Circuncisión del
Señor. Ello era debido a que, según la tradición judía,
esta ceremonia, conjunta con la imposición del nombre al recién
nacido, se realizaba al octavo día de su nacimiento. Inicialmente retrasada
hasta el segundo Domingo de Epifanía, fue San Pío X en 1913
el que la aproximó a la citada fiesta de la circuncisión fijándola
para el domingo entre los días dos y cinco de enero o en su defecto
en el propio día 2 de enero que es en el que tradicionalmente se celebra
en Sevilla, pese a que en los años sesenta fue suprimida del Calendario
Romano Oficial.
Entre las hermandades sevillanas dedicadas
a esta advocación, sin duda la más importante ha sido la del
Dulce Nombre fundada en la Parroquia de San Vicente en 1572 y fusionada desde
1851 con la Hermandad penitencial de la Quinta Angustia. Desde 1973
la meritoria imagen del Dulce Nombre de Jesús , coetánea con
la fundación de la hermandad, procesiona por las calles de la feligresía
de la Magdalena el domingo siguiente al Corpus catedralicio cobijado por
un airoso templete estrenado en 1927.
Habrá quien desconozca que esta imagen
del Niño Jesús formaba parte de un paso alegórico que
procesionaba el Jueves Santo dentro del cortejo pasionista de la Quinta Angustia
durante la segunda mitad del siglo XIX, concretamente desde 1858 Hemos
encontrado la fotografía que encabeza estas líneas, fechable
en las postrimerias del citado siglo, en la que podemos apreciar este curioso
paso en el interior de la parroquia de la Magdalena.