Nuestra web usa cookies propias y de terceros para mejorar la navegación Aceptar.
Puede conocer nuestra política de cookies.
32jacaranda  
 
LA SEVILLA QUE NO VEMOS





 

EL ESPLEDOR DE LA JACARANDA


Las jacarandas en flor competirán con el azul de nuestro cielo en los parques y avenidas de nuestra ciudad


Procesión de Gloria al atardecer en una plaza sevillana. Mayo en todo magnitud
JULIO DOMINGUEZ ARJONA
Como los azules cirios de los nazarenos de Santa Marta recortan , el grisáceo cielo del Lunes Santo, la flor de la jacaranda nos anuncia una confirmación de la alternativa,  de la primavera sevillana.- 

Su flor nos traerá recuerdo de los lirios en Monte Calvarios, o prendidos en la solapa del capilleo matutino de Santa Cruz o San Bernardo   y serán heraldo de los otros lirios, los peregrinos del Camino , que pronto se cuidaran los carreteros de que no lo pisen los bueyes, y para ello se colocaran exornando carretas del Simpecao o en el pelo de alguna guapa rociera .Su forma acampanada, se nos antojará, corneta con recuerdo de impresionante entrada en la Campana o clarín maestrante antes de que se abra el toril.- 


Carretas rocieras emprende su camino hacia la marisma con los primeros calores de junio
Primero fue el azahar, que nos anunció la Semana Santa, después fue la acacia, con su pregón de Feria y ahora la jacaranda, que con su azulada flor, como queriendo pintar de cielo, en el verde de los arboles y su dura semilla, para protegerla de los vaivenes de una Abril que se nos fue , y de un Mayo que ha empezado marzeando , nos dirá que todo no esta consumado , en una primavera de cruces de mayo , escuela primaria cofradiera , en una primavera rociera ,donde los cohetes cruzaran el Guadalquivir de Sevilla a Triana y de Triana a Sevilla , en una vencida primavera eucarística , donde nuestra Catedral ( Museo) se convertirá en plata , para pasear a Dios vivo por la calles de Sevilla.- 

Los Seises desfilando en la procesión del Corpus sobre una alfombra de romero.-
Gracias jacaranda por recordarnos , que la primavera en Sevilla está en su ecuador y si tanto hemos vivido y sentido con nuestras dos fiestas mayores, todavía nos queda saturar nuestras retinas  del blanco de unas carretas camino del Rocío, olor a romero de una mañana de Corpus, oír una voz infantil con un martillo llamado a su infantiles costaleros, saborear los primeros gazpachos con vocación veraniega y tocar todo este milagro para como Santo Tomas creer y no pensar que vivimos un sueño.-

En las semanas venideras veremos mas de cerca  una Sevilla menos turística, pero mas próxima, mas nuestras, mas profunda  y a la vez menos conocida, no suficientemente valorada por propios y extraños.Les aseguro que les sorprenderá.- 
 
 
 

Volver a pagina directorio
Volver a pagina principal
* /* /*