JULIO DOMINGUEZ ARJONA Sevilla 7 de Noviembre de 2005
La Hermandad de El Cachorro se ha visto
obligada a trasladar sus imágenes titulares de penitencia a la antigua
capilla del Patrocinio, paredaña con su templo actual. Unas obras
están principalmente encaminadas a proteger al Cristo de la Expiración
y a su Madre ante posibles incendios como el que destruyó la anterior
imagen mariana, "La Señorita de Triana", el 26 de febrero de 1973.
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Vuelve El Cachorro a residir en la que fue
su casa desde su construcción en el siglo XVIII hasta la inauguración
de la nueva capilla en la Semana Santa de 1960. Hemos querido traer fotografías
antiguas que nos muestren los pasos en este para muchos desconocido templo
dieciochesco.-
En la primera fotografía vemos al Santísimo Cristo de la Expiración
sobre su anterior paso delante del altar mayor de la capilla. Este altar
proviene de la iglesia de San Alberto de donde fue trasladado con la exclaustración
durante la invasión francesa estando presidido por la titular gloriosa
de la corporación, la Virgen del Patrocinio. Cuenta en su ático
con un altorrelieve con un motivo iconográfico muy raramente representado
en el arte cristiano occidental, la Muerte de San José. Centrándonos
en el paso, vemos al Cristo desprovisto de potencias y de corona de espinas
como procesiona habitualmente desde los años treinta.
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Las andas son las estrenadas
en 1929 obra de Castillo Lastrucci que contaban con hasta treinta dos figuras
angélicas distribuidas por la canastilla, siendo muy característicos
los arcángeles que sujetaban los candelabros de las esquinas y los
dos faroles de plata de ley de los costeros. Este paso, que alcanzamos a
conocer en nuestra infancia, fue vendido en 1974 a la hermandad jerezana
de la Sagrada Cena que lo sigue utilizando para portar su misterio titular
lo que da una idea de sus dimensiones.-
La segunda fotografía está
protagonizada por el paso de palio de María Santísima del Patrocinio
situado en posición similar a donde veíamos al paso de Cristo,
esto es en la cabecera de la capilla teniendo el retablo mayor como fondo.
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La imagen es la perdida en el incendio de
1973, que había sido adquirida en 1921 sustituyendo como titular a
otra dolorosa atribuida a Cristóbal Ramos que sigue actualmente en
poder de la hermandad bajo la advocación de Nuestra Señora
de los Dolores. El palio es el actual estrenado en la primera salida procesional
de la nueva imagen en 1923 obra del taller de Olmo y que contaba inicialmente
en su techo de palio con una imagen de la Inmaculada en seda que sería
sustituida en 1937 por el escudo de la corporación. Los respiraderos
de Eduardo Seco y los varales de plata se estrenaron en 1924, pasando estos
últimos al paso de la Virgen de Regla tras la sustitución por
los de Jorge Ferrer en los años cuarenta. Luce la Virgen el precioso
manto a juego con el palio que estrenó en 1926 pudiendo ver en su
delantera el estandarte corporativo con similares bordados también
del taller de Hijos de Olmo con diseño de Emilia Álvarez Udell
de 1929.-
Pese a estos datos, nos
quedaba por precisar la fecha exacta de la fotografía para lo que
nos fijamos en un dato inusual. A la derecha de las andas se adivina el antiguo
y sencillo altar del Cristo de la Expiración con la imagen del Cachorro.
Esto es algo extraño pues el paso de palio se encuentra con las velas
y las flores colocadas en disposición de salir a la calle. Revisando
esos años no encontramos ninguna Semana Santa en que la Virgen procesionase
sin el Cristo (la contraria si se dió en alguna circunstancia de la
que en otra ocasión nos ocuparemos). Por tanto probablemente la fotografía
se realizó con motivo de alguna salida extraordinaria. Pensamos que
setrata
del traslado de la Virgen en su paso de palio a la Exposición Mariana
celebrada en mayo de 1929 en la parroquia de El Divino Salvador y que ya
citamos en un anterior entrega (VER ). Los pasos
de palio que acudieron a esta magna exposición fueron los de Amargura,
Dulce Nombre, Refugio, Merced y Patrocinio aparte de los de gloria de Amparo,
Rosario de San Vicente y Aguas del propio templo. Si bien algún autor
afirma que, ante la insistencia del Cardenal Illundain, el Cristo también
fue trasladado no tenemos constancia documental de ello
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